Según Larrea, vinculado a grupos de derechos humanos, el Gobierno enfrentará "con firmeza el tráfico de armas". Anticipó que las armas que existen en el país, con permiso legal, deberán portar un localizador electrónico en las próximas semanas con el fin de que se las pueda controlar. De esa manera, indicó, se evitará y controlará para que no sean "usadas por la delincuencia común y el crimen organizado". "Pedimos todo el apoyo de la comunidad para lograr la vigencia y la construcción de una sociedad pacífica, democrática y segura, libre de armas", dijo el ministro. El anuncio de Larrea se produjo un día después de que el presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunciase que clausurará las fábricas clandestinas de armas en el país y prohibirá la importación de esos productos. Correa indicó el pasado sábado que si no se logra solucionar el problema de la inseguridad ciudadana en el país "nada de lo que haga el gobierno tendrá sentido", con lo que reiteró que el esfuerzo por dar seguridad a la ciudadanía es uno de los puntales de su Administración. Por ello, señaló que el gobierno prevé anunciar en las próximas horas las medidas para eliminar la violencia en las calles. "Sobre todo va a haber un programa para desarmar a Ecuador: 'Ecuador sin armas', y eso empieza requisando armas, clausurando las fábricas clandestinas de armas que todo el mundo sabe donde están, pero aquí estamos acostumbrados a tolerar lo intolerable y no se hace nada", se lamentó el jefe de Estado. Correa recordó que portar armas sin permiso en Ecuador se castiga con cinco años de prisión. "Vamos a empezar un programa generalizado de requisa de armas", subrayó el presidente, sin proporcionar fechas, al tiempo que indicó que prevé que Ecuador "va a ser un país sin armas, donde (los) niños puedan pasear en paz por las calles".