Adela Zambrano indicó que no han prescindido de ningún empleado y que primero hay que dar gracias a Dios de seguir con vida “para salir adelante, por la provincia, por la ciudad”. Se mostró contenta porque están llegando los clientes, especialmente a comprar artículos del hogar y utensilios de cocina. 

Selenita. Bazar Selenita era otro ícono en el corazón comercial de la ciudad. El edificio tiene afectaciones menores, según las propietarias Idalia y Marita Cedeño Mieles, quienes no han perdido el entusiasmo porque, como dijeron, “aunque nada se compara a esto siempre hemos sido felices en el negocio, siempre hemos tenido clientes que nos han transmitido esa energía positiva para continuar”.

En la antigua iglesia de Los Bosques las hermanas junto con 12 empleados (eran 50) disponían ayer de la mercadería mientras atendían a los clientes que van llegando en busca de artículos diversos. “Es muy emotivo ver a los clientes, es una alegría increíble”, dijo Idalia. 

El edificio de “Selenita” tiene afectaciones en mampostería que pueden ser reparadas y ellas esperan volver cuando se den las condiciones y reintegrar a toda su plantilla de empleados cuando mejore la situación.

SÚPER COLCHÓN. En el supermercado del colchón pusieron manos a la obra de inmediato y el 20 de abril ya estaban en nuevo local, diagonal al ECU 911.  Los dos edificios que tenían en la avenida Alajuela y avenida Manabí colapsaron: uno se fue abajo y el otro será demolido, indicó la administradora Fernanda Saldarriaga. 

No han hecho un inventario para cuantificar las pérdidas. Lo importante, indicó, “es que buscamos alternativas pensando en el cliente que tiene una necesidad inmediata y está con una emergencia. No dejamos ni un momento de  tratar de recuperar lo que teníamos en el local colapsado y otros”.

Mantienen a los 45 empleados aunque tuvieron afectaciones en Manta, donde atienden en la avenida Circunvalación, y en Chone.

En Pedernales el local no tuvo daños graves, pero perdieron la mercadería por los saqueos, dijo Saldarriaga. En esa ciudad proyectan reabrir el almacén.

Son tres ejemplos de lo que está ocurriendo en Portoviejo, donde el espíritu de superación se impone frente a la adversidad y a la tragedia.

Comerciantes formales y autónomos buscan espacios donde instalar sus negocios. Salieron de la zona cero para empezar casi de cero, pero con las ganas de seguir adelante.