A su llega, el mandatario conversó con los damnificados y se comprometió a darles la ayuda necesaria.

Al mismo tiempo, que manifestó que como Gobierno preferiría que los albergados estuvieran con familias acogientes. Sin embargo, "si los damnificados desean estar en un albergue, se les ayudará", precisó. 

Cerca de las 17h00, Correa abordó el helicóptero que lo llevaría a Calceta, otro cantón afectado con el terremoto del pasado 16 de abril.