Ambos mandatarios se encontraron en la ciudad peruana de Tumbes, protagonizando la primera reunión binacional de gabinetes, por lo que estuvieron acompañados por sus respectivos ministros de Estado, dispuestos a tratar asuntos bilaterales y regionales, y evaluar los avances del Plan Binacional, firmado tras el acuerdo de paz. En cuanto a la relación bilateral entre Perú y Ecuador, Correa expresó a su homólogo peruano que “tiene que basarse en la confianza mutua” y abogó por no ser “jamás el tubo de ensayo de un afán divisionista” de América. Así, los gobernantes ratificaron su compromiso de cumplir los programas de integración fronteriza y desarrollo económico concebidos en el citado Plan Binacional. “Ecuador tiene interés en la plena ejecución de los acuerdos de Brasilia, como lo tiene también Perú. Es nuestro deber satisfacer y cumplir las expectativas” de ambos pueblos, señaló Correa. Por su parte, García dejó claro que Perú no tiene “ningún reclamo territorial ni marítimo que hacer al Ecuador… Tenemos una frontera de paz, una frontera de seguridad que afianza la amistad de nuestros pueblos y no tiene elemento del cual pueda derivarse conflicto, enfrentamiento o discusión alguna”, matizó. Alianza petrolera En este encuentro, las empresas estatales Petroecuador y Petroperú suscribieron un convenio de alianza estratégica que permitirá el desarrollo de actividades de mutuo interés en exploración, explotación, transporte, almacenamiento, industrialización y comercialización de hidrocarburos. La alianza incluye también el desarrollo de servicios petroleros, gestión ambiental, fortalecimiento institucional y capacitación. Correa y García fueron testigos de la suscripción de la alianza, entre los presidentes de Petroecuador, Carlos Pareja, y de Petroperú, César Gutiérrez, declaración conjunta que permitirá la negociación del suministro de unos 14.000 barriles diarios de crudo Oriente ecuatoriano en un contrato a largo plazo, cuyo precio será determinado, entre otros, por las condiciones del mercado. En la misma reunión, se concretó la compra-venta de 400.000 barriles de crudo Oriente que Perú deberá levantar en el puerto petrolero de Balao entre el 9 y 11 de julio próximo.