Lapentti asistió ayer, al pleno del Congreso Nacional, acompañado de varios alcaldes y consejeros, y en la que también participo el prefecto de Manabí, Mariano Zambrano. En el lugar, el representante de la provincia del Guayas insistió que existen visos de nulidad en la presentación y posterior trámite del proyecto de provincialización, a más de que, desde el punto de vista económico, sería inconveniente para la población de los cantones peninsulares. “Debemos detener los intentos de romper la unidad provincial y nacional, así como parar la avalancha de provincializaciones que podría darse y retomar, más bien el camino de las autonomías, mecanismo que sí puede contribuir al desarrollo de los cantones olvidados de nuestro país”,, sentenció. El prefecto explicó que la Asamblea Provincial del Guayas, máxima instancia en la toma de decisiones trascendentales, resolvió presentar un recurso extraordinario de revisión ante el Ministerio de Gobierno, para que se revean los límites establecidos para la jurisdicción de la provincia de Santa Elena, por cuanto en dicha delimitación existen vicios de hecho y de derecho. Recordó que los proyectos de Ley deben llegar al Congreso Nacional con los correspondientes sustentos legales, técnicos y económicos, pero, en este caso, los representantes del pueblo han sido desinformados, porque el pedido debió provenir de un comité legalmente constituido, que no existe, por lo que hay ilegitimidad de personería. Además que se requiere, el respaldo del 50 por ciento de firmas de la población, por lo que el apoyo debió ser de 68 mil 500. Sin embargo dijo que solo se adjuntaron 62 mil rúbricas, que ni siquiera han sido validadas por el Tribunal Electoral del Guayas. Tampoco se presentaron los informes de los ministerios de Medio Ambiente y Economía, este último respecto de la infraestructura administrativa y el financiamiento que se requerirá para que el nuevo Consejo Provincial entre en operación. Por mandato de la Ley de Distribución del 15 por ciento para los organismos seccionales, la nueva provincia tendría un presupuesto de cinco millones de dólares, por año, de los cuales, la mitad va a gastos administrativos y el restante para obras. Lapentti dijo que de los análisis realizados, los gastos operativos de la nueva corporación provincial ascenderían a seis u ocho millones, en tal virtud, lo presupuestado no alcanzaría a cubrir esa demanda, de manera que estarían comprometidos los recursos de dos o tres años, para financiar el inicio de las operaciones. Visto de esta manera, el proyecto es inconveniente, porque el Consejo Provincial del Guayas ha invertido en el 2006, 35 millones de dólares, en atención a los cantones peninsulares y para el 2007 y 2008 se destinarán 68 millones de dólares, que superan los montos que obtendrían como provincia independiente, en desmedro de la calidad de vida de la población. Aseguró que por la vía de las autonomías, al asumir competencias en 13 áreas, los cantones de la Península obtendrían 75 millones de dólares, por lo que, una vez más, la provincialización sería perjudicial, desde el punto de vista económico.