La mujer quedó pasmada y después de un instante lo único que alcanzó a susurrar fue y “¿con eso usted cree que se encienda la llama?”.

La mujer, una señora de al menos 40 años de edad, recibía los consejos de la vendedora de una tienda erótica. Le había pedido algo para sorprender a su marido en San Valentín y la respuesta, aquella que la sonrojó, fue “póngase una tentadora, vean una película para adultos y deje volar su imaginación”.

Unos tres días antes de San Valentín las tiendas eróticas reciben a visitantes que, como la señora sonrojada, sólo aparecen una vez al año.

Son hombres y mujeres que para esta fecha llegan como niños en primer día de clases:  mudos, ruborizados,  mirando de reojo lo que hay en las perchas para luego soltar la frase que   parece romper el hielo: “¿Me puede ayudar con algo para San Valentín?”

Antes, solo días antes,  las mujeres compran baby dolls, bragas, tangas y otro tipo de  lencería.

Por estos días Noemí, una chica de 23 años que trabaja en una tienda sexual, se convierte en una especie de psicóloga marital. Escucha los problemas de aquellas mujeres ávidas de técnicas y trucos sexuales y les recomienda ciertos productos que terminan sorprendiéndolas. 

Solo en esta fecha, el 14 de febrero, los ecuatorianos gastan 1,5 millones de dólares en regalos, según un reporte del Instituto Nacional de sStadísticas yCensos del año 2014.

> Comercio. La llegada de esta celebración mueve la venta de todo tipo de productos y servicios que buscan que las parejas tengan momentos inolvidables.

En una esquina del mercado de Tarqui dos chicas con ajustados vestidos rojos entregan hojas volantes para que las parejas acudan a cenar el 14 de febrero a un restaurante lujoso. 

Aquello, las cenas, es parte del mercantilismo que mueve San Valentín. Una encuesta realizada por OLX, página donde se venden productos a través de internet, indica que las invitaciones a cenar encabezan la lista del mejor presente que se puede dar en esta fecha. 

Los usuarios fueron consultados a través de redes sociales y la encuesta  también indica que los osos de peluche y las tarjetas son los regalos menos deseados.

Pero hay más, nunca se ha preguntado dónde terminan los detalles no deseados.

Según el sondeo, casi la mitad de los internautas (48,4%) contestó que lo guardan, el 9,6% confesó haberlos tirado a la basura y apenas el 3% admitió haber vendido el regalo por Internet, mientras que el 26% lo volvió a  obsequiar.  

En un reporte publicado por el diario El Telégrafo, se da cuenta de un estudio realizado a nivel latinoamericano por la empresa Linio.

En los resultados se muestra que en la región los ecuatorianos son “los más generosos” a la hora de dar regalos a sus parejas. La investigación determinó que se consideró que San Valentín es una fecha ideal para “impresionar a la pareja” por lo que los encuestados respondieron mayoritariamente que buscarían obsequios de entre un rango de 30 y 100 dólares.

En el estudio se observó que en Ecuador el 79% de los consultados tiene interés en un presente, superando al 67% que registró Argentina y a México con 51 por ciento.

> Servicios. En servicios de alojamiento también se da cuenta de que aumenta la demanda. 

En un hotel de carretera labora Antonio, quien tiene  ocho años  en este establecimiento. Cuenta que le parece sorprendente la cantidad de carros que entran y salen de los garajes.

“A veces toca esperar, no nos abastecemos para atender a todos, hasta rechazamos clientes”, expresa. 

> Compras. Pero mucho más allá del vínculo que exista entre San Valentín y Eros (dios responsable de la atracción sexual), el Día del Amor y la Amistad mueve a otros sectores de la economía.

En este mes, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (INEC), en el país el trabajo es arduo en 184 negocios que ofrecen comida para llevar, 1.161 establecimientos de venta de flores, 1.358 locales de joyas y 33.938 restaurantes. 

Por ejemplo, desde inicios de este mes  60 aviones cargueros de la compañía aérea Lan Cargo despegaron con 4.398 toneladas de flores ecuatorianas con destino a Estados Unidos y  Europa. 

Las flores, ese producto que ocupa el primer lugar en exportación agrícola no tradicional en el país, es el detalle preferido que los hombres entre 50 y 64 años de edad dan a sus novias y esposas por estos días. 

Se calcula que se gastan un promedio de 16 mil dólares solo los 14 de febrero de cada año, según el INEC. 

Es que San Valentín, a más de un día de amor, es una fuente de datos curiosos registrados por INEC, por ejemplo: los ecuatorianos gastan en esta fecha 33.510 dólares en flores y 1’316.492 en perfumes. 

Quienes más gastan en bombones o chocolates son los casados, pues mueven 116.198 dólares. 

En Manta la actividad de estos negocios empezó a notarse desde el miércoles de esta semana.

Ruth Alarcón, quien labora en un almacén de artículos varios, dijo que la gente se ha acercado a preguntar por peluches, joyas  y otros productos. Algunos hasta dejaban un abono que completarán hoy, cuando acudan a retirar el obsequio. 

Ruth llegará temprano a trabajar hoy al mercado de Tarqui. 

Hoy, al caer la noche, el lugar estará rodeado por un olor a rosas, claveles, pompones y crisantemos. Las fundas plásticas y los pétalos serán recogidos en la noche por los barrenderos y lo mismo harán mañana por la mañana. 

Agustín Mero, obrero de limpieza y recolección, cuenta que en fechas como San Valentín, Día de las Madres o Navidad, en Tarqui se recoge hasta el doble de basura. 

“Esto amanece lleno de flores muertas, tallos y  papeles”, señala. 

Es que San Valentín es más  que un día de cenas y regalos. 

En este día el amor, tema de celebración, desencadena un incremento del comercio y todo tipo de actividades.