La noche del pasado martes Huracán argentino clasificó a la fase de grupos de la Copa Libertadores, ante Caracas en Venezuela.
Después de la victoria, rumbo al aeropuerto, el milagro casi se transforma en tragedia.
El bus que trasladaba al plantel se quedó sin frenos y -en el intento de detenerlo- el vehículo volcó. No hubo víctimas fatales. Sin embargo, el volante argentino Patricio Toranzo sufrió heridas en el pie izquierdo.
El médico habló de amputación parcial de cuatro dedos. El presidente lo negó. Alejandro Nadur, mandamás de Huracán, dijo: “Le hicieron una limpieza. Por supuesto que no le amputaron los dedos, es una barbaridad lo que dicen”.