Él resultó becado por la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt) en el 2013, pero ha estado dos años en nivelación y aprendiendo inglés.
“Estuve en Quito, pero por papeleos y otros trámites he tenido que esperar”, indicó.
Los becados deben inscribirse en un programa de nivelación especial que dura  de nueve a once meses. Este programa se dicta  en francés, por la Alianza Francesa, para quienes quieran acceder a las mejores universidades de habla francófona, o en inglés, con el British Council, para ir a las universidades de habla inglesa. Los estudiantes que no quieran ingresar al programa para estudios en el exterior pueden acceder a una beca para estudiar en cualquier universidad a nivel nacional.
Roberto obtuvo un puntaje de 950 sobre mil en la prueba que toma la Senescyt y estudiará en la Universidad de Manchester (Inglaterra).
En el caso de Manabí son un poco más de mil las personas beneficiadas con diferentes tipos de becas de estudio, no solo las del exterior.  Otro beneficio es la beca “Eloy Alfaro” que asigna mensualmente una remuneración para estudiar en el país.

>RETORNO. Condor accedió a la beca, pero al terminar sus estudios y obtener su título deberá regresar al país. Él, al igual que otros jóvenes, firma un contrato que lo obliga a retornar al país al finalizar sus estudios para la “etapa de compensación” que dura el doble del tiempo de la beca y que se inicia dos meses después de concluido el programa. Caso contrario deben devolverle al Estado el monto de la beca.
De los 2.816 becarios que han retornado al país tras culminar sus estudios, el 67 % está laborando en el sector educativo, (universidades y educación media), mientras que el 25 % trabaja en empresas públicas y el 7% en el área privada, informó la Senescyt.