El jefe del Estado, quien el próximo 1 de junio se reunirá con su homólogo ecuatoriano, Rafael Correa, en la ciudad fronteriza de Tumbes, recordó que la intención de la comunidad internacional para financiar los proyectos ha quedado "un poco en el olvido". Por ese motivo consideró que "hay que relanzarlo, hacer una convocatoria a los donantes de entonces, recordarles sus compromisos y hacer las obras". El aludido plan fue firmado después de la suscripción del Acuerdo de Paz, en 1998, que puso fin a décadas de conflictos armados en la frontera por una demarcación inconclusa. El último conflicto bélico fue en 1995, en la zona del río Cenepa, y concluyó con un alto el fuego auspiciado por los garantes del Tratado de Paz, Amistad y Límites de 1942: Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos. Con el Acuerdo de Paz se procedió a concluir la demarcación y se establecieron las pautas para la navegación en los ríos amazónicos que ambos países comparten, así como la creación de centros de desarrollo comercial e industrial. En declaraciones que recoge la agencia estatal Andina, García agregó que algunos proyectos, como la carretera de Perú a Ecuador, han encontrado "tropiezos", tras las evaluaciones técnicas que sugieren su cambio de ruta. El mandatario advirtió que "los donantes de Europa, que quieren donar 60 millones de euros, dicen que no se puede alterar la ruta y que sólo financiarán si no se cambia", por eso subrayó la necesidad de discutirlo. Igualmente, señaló que ambas naciones tienen un conjunto de proyectos referidos a la limpieza del canal internacional que comparten y a la articulación de servicios de salud, seguridad y vigilancia para evitar el contrabando. García aclaró que los enclaves de desarrollo serán abordados, tal cual fueron diseñados en el Plan Binacional, porque son convenios internacionales que el gobierno peruano debe respetar. "Estoy seguro que vamos a poner en práctica eso que se ofreció y no se cumplió", puntualizó.