Correa reveló hoy que luego de su advertencia, la Asociación de almacenes de electrodomésticos aceptó que ha cometido "excesos" y se comprometió a no exhibir en los escaparates un precio de venta al público al contado y otro a crédito. Presentar los dos precios es, según Correa, una estafa, por lo que la Asociación se comprometió a transparentar la información crediticia y a tener un solo precio de venta al público. "La tasa de financiación no podrá ser mayor a la tasa de interés convencional vigente, que es del 14,97 por ciento, es decir menos de 15 por ciento de interés. Estaban cobrando hasta más del 70 por ciento de interés, y se aplicará únicamente sobre el saldo del capital, es decir sobre la deuda", aclaró Correa. En su programa semanal de radio, el presidente indicó que los comerciantes de electrodomésticos se han comprometido "a no volver a realizar estas prácticas". Asimismo, indicó, se comprometieron a dar trata preferencial a créditos menores a 300 dólares, consistente "en una reducción del 30 por ciento de la tasa máxima convencional del 15 por ciento, es decir (servirá) para ayudar a los segmentos más pobres de la población". De igual manera, señaló que su gobierno se comprometió "con gusto" a tener un mayor control para evitar el contrabando, como lo solicitó la Asociación, pues los comerciantes se ven afectados por el ingreso irregular de mercadería. El pasado 5 de mayo, Correa anunció que el gobierno pondrá directamente denuncias penales ante la Fiscalía contra los bancos y almacenes de crédito que, en el plazo de una semana, no ajusten sus tipos de interés al máximo legal y continúen cobrando hasta el 70 por ciento. El presidente dijo hoy que con respecto a los bancos el asunto es más complicado porque éstos "saben hacer trampas". Según el mandatario, los bancos dicen "estamos cobrando el interés convencional de 14,97 por ciento, pero por otro lado le cobran el 8 por ciento de comisiones, 4 ó 6 dólares en servicios que los obligan a comprar". Señaló que debido a esta circunstancia se ha enviado a estudio una reforma a la Ley para poder regular a la banca. En esa reforma, explicó, la Junta Bancaria pondrá las tasas máximas, se eliminan las comisiones y se establecen costos para los servicios bancarios que van a ser opcionales y no pueden obligar a los clientes a comprar. Correa pidió a la ciudadanía que apoye la Ley que se ha enviado al Parlamento al considerarla "tremendamente beneficiosa" y que, a su criterio, "evitará los abusos de la banca". Asimismo, formuló un llamamiento "patriótico" a los diputados para que apoyen esa Ley, a la que calificó de "perfectible" por lo que acogerán sugerencias aunque, reiteró, "la esencia de la Ley es tremendamente buena".