Unos 700 partidarios de Patiño, entre los que se encontraban varios ministros, otros altos cargos y funcionarios del gobierno, además de seguidores de su grupo político, Alianza País, acudieron al acto, en el que el responsable de Economía presentó seis fragmentos del video. Entre aplausos y vítores, Patiño entró en el anfiteatro del Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina (CIESPAL), en Quito, al mismo tiempo que se escuchaban gritos de "abajo la prensa pagada", dirigidos a los periodistas que cubrían el acto. Las primeras palabras de Patiño fueron para pedir a los asistentes que no atacaran a la prensa, pero los gritos contra los medios de comunicación y los "periodistas esbirros" se repitieron durante las casi tres horas del acto. En un momento de la presentación, Patiño, que fue reiteradamente aplaudido y jaleado, tuvo que pedir a un hombre, que intentó arremeter contra un cámara de la televisión Teleamazonas, que se contuviese, pues ese tipo de actuaciones sólo perjudicaban a su persona. Teleamazonas fue la cadena, que con unos pequeños fragmentos, dio a conocer el lunes pasado la existencia del video, que supuestamente implicaba a Patiño en una negociación para manipular el pago de la deuda soberana de Ecuador, en concreto los bonos Global 2030. Al final del acto, el propio Patiño dijo que "me avergüenza" la presencia en la sala de un periodista de Radio Morena, propiedad del diputado opositor al gobierno Luis Almeida, del Partido Sociedad Patriótica (PSP), del ex presidente Lucio Gutiérrez. También acusó a Teleamazonas de utilizar "de la manera más vil" contra él los "tres pedacitos" del video que emitió, sacados de contexto. El video fue facilitado a Teleamazonas por Quinto Pazmiño, un ex colaborador de Patiño despedido una semana antes. La grabación causó un escándalo a tal punto que el Parlamento ha llamado a informar al ministro, mientras la Fiscalía General y la Contraloría del Estado abrieron sendas investigaciones. En los fragmentos presentados hoy por Patiño, Carlos Abadi, de la empresa Abadi, que asegura bonos de deuda soberana, plantea al ministro una posible operación en la que este debía "asustar" al mercado, con indicios de que no se iban a pagar los intereses de los bonos Global. De ese modo, se elevarían las primas de seguro que podría cobrar Abadi a los tenedores de deuda, hasta unos 250 millones de dólares, tras lo que Ecuador pagaría puntualmente, lo que dejaría un beneficio para el Estado y una comisión para los aseguradores. El ministro aseguró que en la reunión no hubo ningún acuerdo y que él la había utilizado para "sacarles la información para ver los mecanismos perversos y corruptos" utilizados para manipular los mercados de deuda y obtener grandes beneficios para unos pocos. Patiño reiteró hoy que él, con la autorización del presidente, Rafael Correa, ordenó a Pazmiño la grabación del video dentro de una "estrategia" para descubrir la corrupción en torno a la deuda.