Con un partido de fútbol entre los empleados municipales y los dirigentes comunitarios del sitio Pile de Montecristi, se inauguró la cancha encespada que se construyó con recursos económicos del cabildo. Para Jorge López, dirigente comunitario, lo importante no fue el marcador del encuentro que terminó empatado a 2 goles, sino la confraternidad deportiva entre el alcalde Cristóbal Toro y “el pueblo”.