La regla universal elemental, a menores ingresos, menores gastos, es, como todos conocemos, una de las medidas que se aplicarán en el país para amortiguar la crisis.

Pero lo nuevo - a lo mejor no para muchos- es que a los municipios y otros organismos seccionarles se les recortará la contribución del estado. Y hace sentido, porque solo se reparte lo que se tiene o hasta donde se tiene. La pregunta entonces es: ¿qué debe hacer un organismo seccional con menos dinero? Y la respuesta parecería que cae también en por su propio peso: menos dinero, menos inversión, menos gasto. Pero, como he comentado en ocasiones anteriores, lo que los particulares podemos y debemos hacer cuando caen nuestros ingresos, las instituciones públicas de desarrollo, como es en esencia un municipio, tienen que enfrentar la crisis con medidas especiales porque de no hacerlo la depresión, consecuencia de una crisis profunda, se expande como peste por la comunidad y la obligación es evitarla.