Actualizado hace: 931 días 8 horas 38 minutos
Edificaciones
El pueblo saraguro no deja que el tiempo cambie sus tradicionales viviendas

Desde su cultura hasta sus viviendas, muestran que a pesar del paso del tiempo su identidad sigue latente.

Sábado 10 Octubre 2015 | 04:00

 El cantón Saraguro, ubicado al noreste de la provincia de Loja, mantiene la tradición apegada a la tierra como su forma de identidad e integración social. 

Sus viviendas tienen forma rectangular.  Hasta la década de 1970, el principal material utilizado para su construcción era el bahareque. 
A partir de entonces, hasta la actualidad, se han incorporado otros elementos como el adobe, el ladrillo y el bloque, debido a la falta de materia prima disponible, provocada por la deforestación de los bosques nativos y por la influencia de la arquitectura urbana.
 
> MÁS DETALLES. En el libro ‘Memoria oral del pueblo Saraguro’, una investigación realizada por el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), se relata que en la construcción de la vivienda de estos indígenas se considera mucho la orientación, que es determinada por factores climáticos. 
El ‘asolamiento’ es una determinante importante, pues según estas creencias ancestrales, se refiere al sitio por donde abriga el Sol en las mañanas y en horas de la tarde. 
Por esta razón, la orientación de sus ejes va siempre de norte a sur para recibir los rayos solares a cualquier momento conforme la topografía del terreno. 
La otra determinante es la dirección de los vientos. Esto se refleja especialmente en la forma de los tejados, puesto que sus culatas o aleros son de mayor longitud para que el corredor se ubique en el centro y se pueda protegerlo por ambos lados. 
 
> DISTRIBUCIÓN DE LAs VIVIENDAs. En la cocina se ubicaba el fogón, en un lugar escondido del viento y de las personas ajenas, además de incluir el cuyero, la alacina, el muyuchi, el soberado y la cama donde dormía la familia. 
La sala, una segunda pieza situada en el centro de la construcción, era un cuarto más grande que estaba destinado para guardar y almacenar los productos como granos secos de maíz, porotos, habas, entre otros.
En ciertas ocasiones, también se lo utilizaba para las diferentes fiestas familiares, religiosas, matrimonios y velorios. 
Generalmente, este espacio era amoblado con largos bancos de madera y una mesa grande dispuesta para ser usada en cualquier actividad familiar.
 
> antecedente. En épocas pasadas, se construían casas de bahareque con la participación comunitaria, en unos 30 o 40 días. 
La edificación no tenía ningún costo y se construía en mingas, donde participaban familiares y más moradores de la comunidad hasta terminarla. 
Esta actividad era realizada por voluntad propia de las personas mayores, los jóvenes, los niños, los hombres y las mujeres de la comunidad. 
El cambio en la elaboración de casas de bahareque por adobe se dio porque las edificaciones de adobe tenían mayor durabilidad y la madera cada vez iba escaseando en los lugares cercanos. 
Hoy en día, estos materiales incluso son reemplazados por otros más modernos como el ladrillo, el bloque o el asbesto. 
Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
  • ¿Qué te pareció la noticia?
  • Buena
  • Regular
  • Mala

Más noticias