Dionisio Montes, quien cuida vehículos por el sector, señaló que los letreros de prohibido estacionar están en la vereda del frente por lo que, tal como ocurre en el resto de calles, en ese sitio debería poderse parquear.
Él cuenta que ha visto cómo los carros se parquean pese a los conos y dijo que de no darse esto sus ingresos se reducen.
César Briones, sacristán de La Merced, indicó que los conos se colocan para facilitar el acceso de carrozas fúnebres. Explicó que casi a diario se celebran misas de difuntos y que deben tener un lugar donde parquear para poder bajar los restos mortales. Observó que de no darse ese parqueo la llegada de los féretros al templo puede complicar la circulación en el lugar. Briones dijo que la iglesia cumple un servicio a la comunidad.