“Latacunga celebra cada año su fiesta popular que está muy bien enraizada.

En los últimos años se celebra con más colorido y sobriedad y menos consumo de alcohol en relación con años anteriores.

En esta fiesta la ciudad vive la tradicional celebración de la capitanía de la Mama Negra, un desfile multicolor, que tiene por escenario a las calles más pintorescas de la urbe andina, se desarrolla como preámbulo de las festividades de conmemoración de un año más de la independencia.

 

>Ceremonia. La caravana de la alegría, que dura varias horas, empieza en la avenida Cívica.

Después del desfile se realiza el acto central de las celebraciones, que por lo general se cumple en la visera de la avenida Cívica, es la transmisión del mando a la Mama Negra del año.

Vistosamente ataviados y con sus rostros pintados de negro y blanco los colores simbólicos del festejo, los personajes de las comparsas agradan con sus bailes a las personas que en gran multitud concurren a ver este espectáculo alguno de ellos turistas nacionales y extranjeros.

El principal acto del ritual es la Mama Negra. Al igual que en años anteriores, lucía un atuendo particular: una blusa rosada, amplios follones negros, pañolones de diversos colores y muchos collares y su rostro cubierto con pintura negra.

Uno de los símbolos de la transmisión del mando es la entrega de la muñeca negra Baltasara.

Otro de los personajes importantes es el Rey Moro.

 

>Origen. El festejo tiene su origen tras la erupción del Cotopaxi de 1742, los latacungueños organizaron procesiones en honor de la Virgen de las Mercedes, para pedirle que aplaque la furia del volcán.

Después, una vez al año, le ofrecieron fiestas y comparsas”.