Con este triunfo el jugador español consigue el tercer título de la temporada y el número 67 de su carrera, el 47 en tierra batida. Además, Rafa se sacó la espina que tenía con Fognini, quien lo había derrotado dos veces este mismo año, en las semifinales del torneo de Río de Janeiro por 1-6, 6-2 y 7-5 y en octavos en Barcelona por 6-4 y 7-6 (6).
Nadal, quien no había vuelto a disputar partido alguno tras ser eliminado el pasado 2 de julio en la segunda ronda del torneo de Wimbledon por el alemán Dustin Brown, fue creciendo en su juego a lo largo del torneo alemán y volvió a sentirse cómodo y con recursos sobre la arcilla.
Fognini no le puso las cosas fáciles. Tras un primer set muy igualado, Nadal se puso con 3-1 en el marcador de la segunda manga y después hizo suyo el encuentro.