Desde pagos de servicios básicos hasta transferencias de dinero es posible hacer con las aplicaciones móviles bancarias.
La ‘fiebre’ de las apps ha contagiado a las instituciones financieras. Hoy en día la mayoría de bancos cuenta con su propia aplicación, desde la que el cliente puede hacer uso de variados servicios sin tener que pasar por las incómodas filas; además puede efectuar transacciones en cualquier lugar y en el momento que desee.