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El turismo de la sierra se adueña de las playas

Paulina Albán y sus hijas no quieren regresar a Ambato. Llegaron por una semana a Crucita, y las cautivó el mar y el sol.

Miércoles 22 Julio 2015 | 04:00

Sus hijas Paula y María José González, de catorce y cinco años, la trataban de convencer para que la estadía se extienda unos días más. “Es que ellas no conocían el mar, el cual es maravilloso”, dijo la madre de familia, que hacía cálculos con la intención de quedarse más tiempo.

Por estos días la playa de Crucita empieza a llenarse de visitantes de la Sierra, en donde el 4 de julio se terminó el año lectivo escolar, y niños y adultos escogen Manabí para pasar unos días de vacaciones.
Movimiento. El negocio del turismo dinamiza la economía. Eliécer Castro aprovecha la llegada de turistas para alquilarles sillas de plástico, parasoles y carpas en la playa de Crucita. Cobra entre uno y cuatro dólares por los accesorios. Dijo que el sábado y domingo ya se vivió la buena temporada y alquiló todo. Roxana y Elizabeth Moreira señalaron que ante la gran cantidad de personas en esta playa, fletaron un carro y se fueron al sitio La Boca, donde el mar se une con la desembocadura del río Portoviejo. Allí la pasaron súper, destacaron.
Óscar Mendoza, del hostal Marlin, dijo que cada año crece la presencia de turistas. Puso como ejemplo que a su local antes arribaban personas de Quito, pero ahora se suman de Cuenca, Ambato y otras ciudades de la Sierra. Explicó que en agosto se vive el pico más alto. “Allí toda la capacidad hotelera (1.633 camas) se llena”, aseguró.
En Manta Luis Loor, quien  vende libros en una carreta rodante en la playa El Murciélago, dijo que por las vacaciones de la Sierra sus ventas se triplican. En agosto vende entre 20 y  30 libros diarios. 
En los hoteles de Manta la reserva supera el 70%. En el Oro Verde ya están reservadas las habitaciones para los dos últimos fines de semana de julio y todo agosto. 
En la hotelería de Tarqui ya se hospedan grupos de empleados y niños de escuelas.
En Pedernales, en cambio, reciben a turistas de la Sierra y de Colombia que aprovechan la cercanía y las buenas carreteras para llegar a este balneario, indicaron los servidores.
En Bahía los operadores turísticos han difundido las bondades del cantón para atraer a los visitantes y ofrecen descuentos y promociones por grupos de alumnos y padres.
Jimmy Mendieta, dueño de un restaurante en Crucita, indicó que los visitantes de la Sierra gustan mucho de los mariscos y de los pescados, sobre todo en ceviches frescos, así como fritos con ensalada, por eso dijo que los dueños de restaurantes se preparan para atenderlos bien. 
Menciona que esta temporada es la más importante del año, ya que deja las mayores ganancias económicas, incluso más que en carnaval o Semana Santa, ya que, dijo, esta dura más de dos meses y además hay 30 días de alta actividad.
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