Un hecho importante en la vida de Thomás de Berlanga es que, desde Puertoviejo (Portoviejo), el 26 de abril de 1535 dirigió una carta al Rey de España para informarle sobre el descubrimiento de las Islas Galápagos.
Antes había visitado Bahía de Caráquez y Charapotó, donde le informaron sobre los asesinatos y atrocidades perpetrados por Pedro de Alvarado contra los pacíficos nativos (los Caras). “En esta Bahía de los Caráquez había entrado antes el Adelantado Pedro de Alvarado que destruyó el pueblo que ahí estaba habitado por los nativos y alborotó otros; y por donde fue con su gente es lastima ver el destrozo y muertes que causó. Yo me partí desde esta Bahía a pie porque las bestias venían cansadas por venir a esta villa de Puertoviejo, por lo cual vimos en un hermoso valle que se llama Charapotó, que tiene un muy buen río, a donde hay muchos indios pacíficos porque el capitán Francisco Pacheco se ha dado tan buena manera que tiene de pajes a treinta señores”.
Después de visitar Puertoviejo , Thomás de Berlanga se dirigió al Perú cumpliendo órdenes del Rey de España para conocer la forma como estaba gobernando Francisco Pizarro; difícil misión, como veremos en la próxima entrega. El grupo de frailes dominicos estaba dirigido por Pedro de Córdova, que fue el primero en denunciar los terribles maltratos que se daban a los “naturales” o nativos (que no me agrada llamarlos “indios”) por parte de los peninsulares. Esa protesta generó una larga controversia que duró un siglo entero. El mayor repudio era por la encomienda en base de la cual se explotaba a los “naturales” en forma inhumana.
A consecuencia de esta denuncia , se dio el célebre sermón pronunciado por Antonio Montesinos, fraile dominico, con la ayuda de Thomás de Berlanga y Pedro Córdova. A esa misa, asistió Diego Colón, hijo del descubridor.” Soy la voz que clama en el desierto”, dijo entre otras palabras el cura Montesinos.”todos estáis en pecado”, refiriéndose a los españoles, por consentir la explotación y el maltrato que se daba a los nativos, a quienes los calificó de seres inocentes.
Montesinos es el pionero, el precursor de la lucha en defensa de los derechos humanos de los amerindios, aunque luego esa bandera de lucha la tomaron con fervor Thomás de Berlanga y Bartolomé de las Casas…Nuestros “indios” deberían venerar a estos dominicos por su valor y entereza.
Los peninsulares dijeron que ellos promovían “doctrinas escandalosas” por oponerse a la encomienda.
Como veremos después, en las posteriores entregas, Berlanga fue el Primer Obispo de Panamá, el primero que vislumbró la necesidad de construir el canal inter-oceánico y uno de los primeros en condenar el asesinato de Atahualpa por orden de Pizarro en Cajamarca.
- ¿Qué te pareció la noticia?
- Buena
- Regular
- Mala
.jpg "Berlanga en Portoviejo, Bahía y Charapotó (ii)")
