Grant Botti, adolescente de 14 años oriundo de Arkansas, decidió un día ir a nadar al aire libre. Pero luego la naturaleza le cobró cara su placentera idea.
El joven despertó con un horrible dolor en uno de sus oídos y cuando quiso saber qué tenía, su madre encontró una horrible sorpresa: un ciempiés gigante. De inmediato la mujer partió con Grant para el hospital.