“Si hablamos de música nos referimos a la parte instrumental, por eso es necesario aclarar que la canción es la mezcla entre letra y música”, indica el profesional.

En el tema del uso de los himnos, el docente Jerfreir Vera señala que por protocolo y civismo deben ser entonados antes que cualquier otro tipo de canto.

“En la actualidad se ha perdido el valor de entonar el Himno Nacional y los de nuestra provincia y cantón, por ello hago hincapié en que en cada acto se los incluya al inicio”, destaca Vera. Según este maestro, el himno no puede ser reemplazado por otro tipo de canto aunque fuera muy bonito o importante.

Con Vera coincide el licenciado en Pedagogía Musical Elvis Moreira.

Moreira considera que si el himno es reemplazado por otro canto se puede considerar una falta de respeto hacia un símbolo. 

En cuanto a los pasillos Vera indica que su importancia es innegable, pues forman parte de las tradiciones nacionales.

 

>Diferencias. Moreira, por su parte, indica que aunque el pasillo es un género tradicional a nivel nacional y de otros países, nunca puede reemplazar el lugar de un himno. 

“Los pasillos como el de Manabí cuentan historias y destacan la belleza y riqueza cultural de nuestra tierra”, menciona Loor.

Él añade que dentro de este canto se resalta el espíritu hospitalario de la gente de la provincia y la riqueza cultural del montuvio. 

Lo mismo piensa Vera; sin embargo, él añade que la historia que contienen los himnos enseña a valorar a las generaciones los sacrificios que hicieron los antepasados por la patria. “Nuestro himno narra una historia que no podemos desconocer”, afirma. 

Moreira indica que por tanto el himno de una provincia o cantón y el nacional deben respetarse, ya que dan valor identitario al igual que la bandera y el escudo.