Esto luego de que guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) dinamitaran el oleoducto Trasandino, cerca de Tumaco (Nariño), y provocaran el derrame de unos 4.000 barriles de crudo.
“Esto implica una tragedia social y ambiental”, dijo el presidente de la petrolera Ecopetrol, Juan Carlos Echeverry, según informó la agencia Reuters.
CONTAMINACIÓN. El ataque contra el Oleoducto Trasandino, ocurrido el lunes anterior, provocó un derrame que inicialmente contaminó sólo el río Caunapí, después el Rosario, pero ahora se desplaza una mancha de 20 kilómetros
de crudo que llegará hasta la bahía de Tumaco, sobre la Costa Pacífica, pese a los esfuerzos de la empresa Ecopetrol por contenerla.
El funcionario reveló que la contaminación que ocasionó el ataque dejó sin agua a 4.000 personas y provocó graves daños a la flora y la fauna, incluido el riesgo para el hábitat del olinguito, un mamífero carnívoro
descubierto recientemente.
El sector petrolero ha sufrido 16 ataques desde que la insurgencia rompió el cese al fuego.