Antonio Robles, morador del sector, cuenta que todos los días debe regar la calle, ya que el polvo le afecta. “Desde hace más de cuatro años tenemos este problema, ya no sabemos a quién debemos acudir para que nos ayuden”, dijo Robles. Es que los conductores aseguran que los carros se destruyen por los huecos que están a lo largo de la vía que conecta con La Boca de Crucita, “queremos soluciones en esta carretera, ojalá nos escuchen”, dijo. 

Robles recordó que esta arteria vial sólo ha recibido dos mantenimientos, por lo que esperan que la directiva de la parroquia así como autoridades municipales les ayuden mejorando la vía.