Eran las 12h00 de ayer cuando se realizó el operativo entre la Policía de Menores (Dinapen) y la Junta Cantonal de la Niñez y Adolescencia. Una denuncia a través de una llamada telefónica alertó a las autoridades de las precarias condiciones en las que vivían los niños. Cuando llegaron a la vivienda ubicada en Urbirríos, ellos estaban acompañados de su madre mientras veían televisión.

 

Paola Dávila, jefa de la Dinapen, indicó que según las investigaciones preliminares los niños de 9, 8, 6 y 4 años no estaban inscritos en el Registro Civil, por lo que prácticamente no existen para el Estado ecuatoriano y nunca han ido a una escuela. La madre de los niños indicó que ellos no tenían documentos porque se le habían quemado. Sin embargo, reconoció que no los había inscrito porque vivía lejos, aunque no especificó dónde, y que sólo vive desde hace tres meses en Manta. “Ellos no cuentan con registro de vacunas ni alimentación que corresponde a su edad, ya que sólo se alimentan de pan; claramente se están vulnerando todos su derechos”, agregó Dávila. Luego del rescate los menores fueron llevados hasta el hospital Rafael Rodríguez Zambrano, donde se les realizó una evaluación médica y se les emitió un certificado. Mientras que Marisol Zambrano, abogada de la Junta Cantonal de la Niñez y Adolescencia, indicó que por el momento se buscará un familiar cercano para que pueda acogerlos, hasta que la autoridad competente decida el destino de los menores. Una opción sería una casa de acogida, donde puedan estar hasta que se resuelva su situación.

recuperarlos. Si la madre quiere recuperar a los menores, debe presentar una apelación ante el Juzgado de Menores.