Por eso debemos demostrarle a este gobierno, o cualquiera  que venga, que los manabitas sí podemos administrar lo nuestro para que no nos sigan viendo como tierra de conquista, como en el tiempo del  yugo español. Sucede esto por el servilismo que existe dentro de las instituciones, por gente que nos representa a nivel de la provincia.

Es hora de que alguna autoridad de elección popular salga en defensa de nuestra ciudad, ya sea el alcalde, el prefecto o algún ciudadano preparado para defender lo nuestro: existe una especie de confabulación dentro de las instituciones manabitas, porque se siente en el aire de la administración pública. Existiendo obras para Portoviejo o proyectos de inversión de cualquier índole, a la hora de la hora se la llevan a otras ciudades. Esto no puede seguir sucediendo. Lo dijo una autoridad cantonal en una de sus reuniones con el pueblo, que existía pintura para las calles de  la ciudad, y estas se fueron hacia otro lado. Y así mismo sucede con las viviendas, empresa eléctrica, etc., el pueblo y el administrador de la ciudad se están cansando con este atentado contra Portoviejo; y se está conformando un comité para la defensa del mismo, liderado por la Unión de Barrios, consejos barriales, consejos parroquiales, asociaciones, clubes, fundaciones, líderes barriales y, por su puesto, al pueblo en general; se va a convocar a una gran marcha pacífica para defender la institucionalidad, nuestros proyectos y obras para Portoviejo y de una vez por todas desenmascarar a los que hacen daño a Portoviejo. La credibilidad y la confianza del pueblo se gana sirviendo al mismo, reconocemos que el trabajo es honroso, pero no se puede ser muy adulones y no se puede atentar con nuestra ciudad.