El documento ha sido analizado en tres de las siete comunas.
El Plan de Vida es para los tsáchilas lo que el Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial (PDOT) es para los gobiernos autónomos descentralizados.
“El Plan de Vida recoge las necesidades que tienen todas las comunas en vialidad, salud, educación y territorio”, dijo el gobernador Javier Aguavil.
El documento fue elaborado por la Prefectura y ha sido socializado a los directivos (presidentes y tenientes) de las comunas.
Los tsáchilas decidieron en el pasado Congreso de la nacionalidad nombrar una comisión que analice y apruebe el documento.
“Son dos personas por cada comuna las que integran la comisión tras recoger opiciones y criterios”, indicó Aguavil.
Por su parte, el prefecto Geovanny Benítez dijo que el Plan de Vida será articulado al Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial de la provincia para priorizar proyectos.
El texto del Plan de Vida se ha analizado desde hace más de cinco años, y fue impulsado por el exgobernador Gumercindo Aguavil.
Sin embargo, y pese a tener varios años de diseño, algunos comuneros creen que “no se ha socializado con las bases”.
Ese es el concepto que tiene Freddy Calazacón, de la comuna Chigüilpe. “Si van a una comuna y le preguntan a alguien si sabe qué es el Plan de Vida y qué contiene le van a decir que no conocen nada al respecto”, refirió. Aunque coincide en que el tema vial es vital para el desarrollo.
Según el gobernador tsáchila, se necesitarían al menos 80 millones de dólares para cumplir con lo descrito en el Plan de Vida.