Sostengo que los manabitas somos una “raza superior”. Prueba de ello es que el más grande de todos los ecuatorianos, don Eloy Alfaro, es manabita. Nuestros antepasados prehispánicos, los mantas, surcaron con su balsas el pacífico, y  los “caras” subieron la cordillera y se configuraron con lo que fue el reino de los shiris y nuestra gente guerreó fuertemente contra la invasión inca.

En los últimos dos años estoy aterrizando en Manta, para retomar mis raíces y estudiar y reflexionar sobre nuestra provincia, para aportar un grano de arena al anhelo profundo que hay en los manabitas, de que acentuemos nuestra identidad, sacarnos el complejo provinciano y buscar gestar una unidad en torno a los grandes objetivos y valía de los 22 cantones, para que, unidos, defender y reclamar ante el poder central espacios de representatividad para nuestra gente.

El  jueves 30 de abril, en Calceta, en el almuerzo que se daba al Sr. vicepresidente Jorge Glas y representantes de varios sectores productivos de la zona norte: ganaderos, cunicultores, camaroneros, cacaoteros, pescadores, criadores de caballos, escuché las más sabias y sentidas expresiones de lo que son y hacen los manabitas los 365 días del año, con su trabajo y amor.

Desde hace algunas semanas un grupo de manabita viene haciendo reuniones y recorriendo la provincia para promover la voluntad colectiva de que un manabita sea candidato a la presidencia de la república. La iniciativa nos parece encomiable, porque a Manabí sólo la defenderán y promoverán los manabitas, ya que está visto que los macroproyectos, que el presidente Correa ha querido impulsar en la provincia, han sido boicoteados por agentes de otros intereses que no les conviene de que la provincia, que Manta, sea sitio HUB, de Sudamérica. 

Con algunos distinguidos dirigentes de entidades de la provincia estamos gestionando una cita con el Sr. Presidente de la República para clarificar en qué han quedado la Refinería del Pacífico, el puerto y aeropuerto internacional de Manta, la ruta Manta-Manaos. Asimismo, con el candidato a rector de la ULEAM, Miguel Camino, se busca dar a conocer al primer mandatario la necesidad de apoyo para reestructurar la universidad  para proyectarla como la Universidad del Mar y ponerla como instrumento para la nueva política que tiene el estado, para ampliar su frontera marítima. También promovemos que Lídice Larrea sea presidenta de la Asamblea.

Al ser Manabí la tercera provincia en importancia electoral, es requerible, de que sus dirigentes acuerden unidad de objetivos, y planificar con los gobiernos cantonales, como desarrollo el fortalecimiento para la mejoría y eficiencia productiva, que se empate con lo que delinea la Senplades y el COOTAD.