En primer lugar tenemos, que el lunes 4 se dio inicio al periodo escolar en la región Costa, si bien es cierto que no en todas las escuelas y colegios se realizó este acto símbolo de la actividad cultural y educacional, en razón a situaciones climáticas que han llevado a que las autoridades competentes programen ese acto académico para después de un mes. Pero en todo caso, son más de dos millones los alumnos registrados en esas escuelas y colegios que están iniciando este nuevo periodo que dará paso a que continúe la preparación de los futuros ciudadanos, los que en años más tendrán la oportunidad de ser padres de familia, así como funcionarios públicos o privados, profesionales, obreros, empleados y trabajadores en general.
Luego tenemos que el próximo domingo se conmemora el Día de la Madre, celebración que a más de nacional, es también internacional, ya que el segundo domingo de mayo está dedicado a que se recuerde a este ser querido en el mundo entero. Por su modo de ser, por su accionar y por lo que representa la mujer que ha sido madre, realmente todos los días estaríase celebrando a la Madre. Ella se lo merece.
A ella le corresponde ser identificada en primerísimo lugar dentro de la familia. Porque todos hemos tenido nuestra respectiva madre. Porque todos hemos recibido de ella el amor, cariño, la entrega y la dedicación que en el día a día y de diversas maneras y acciones la madre entrega al hijo.
El calendario ha establecido un día especial para que se conmemore universalmente a la madre y es ahora cuando se está a cuatro días de esa fecha, que dedicamos esta parte de nuestro comentario semanal a rememorar a esta mujer que siendo madre se merece el respeto, el aprecio, el amor y el reconocimiento de todos. La madre es madre y a ella llegamos en el ayer, el hoy y el mañana. Exteriorizamos nuestro cariño y nuestra felicitación a todas las madres del mundo. A unas con nuestro recuerdo afectivo y nuestras oraciones hasta el más allá. A otras, con el beso simbólico en representación de los hijos a la madre universal. Pero, siempre teniendo presente que la madre es el don preciado, que hasta Dios siendo tal quiso tener en María a su propia madre. Los que ya no la tenemos, unimos nuestro pensamiento dirigido a este ser que nos dio la vida. Rezamos por ella y en su nombre nuestra felicitación a todas las madres del mundo.
