Según el comunicado difundido a los medios de comunicación, “la intervención es una medida académica y administrativa de carácter cautelar y temporal, tendiente a solucionar los problemas que atentan el normal funcionamiento de las universidades”. 

Enrique Santos, consejero del CES,  explicó que la intervención buscará establecer si los decanos, miembros del Consejo Universitario, rector encargado y vicerrectores, cumplen actualmente los requisitos y perfiles para ocupar los cargos. De no ser así, serán reemplazados por un delegado que designará la comisión interventora en los próximos días.

Según Santos, el rector encargado Antonio Hualpa; la vicerrectora académica, Rocío Saltos y el vicerrector administrativo, Ricardo Ávila, no cumplirían uno de los requisitos que establece la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES) para asumir estos cargos hasta que se convoque a nuevas elecciones. Este requisito es haber realizado o publicado obras de relevancia o artículos indexados en una revista de prestigio.     

“Ante ese vacío jurídico, y no ante la presión de ningún sector interno o externo de esta universidad, el Consejo resolvió la intervención integral de la universidad, a efectos de garantizar el normal funcionamiento de la misma”,   enfatizó Santos. 

El funcionario aseguró que esta intervención será sólo por tres meses, aunque si en el camino se detectan algún tipo de irregularidades podría prolongarse a un tiempo no definido. Entre los casos que el CES no descarta investigar están el supuesto registro irregular de títulos y una supuesta oferta ilegal de maestría. 

LAS ACTIVIDADES SIGUEN. El Consejo aclaró también que esta medida no suspenderá las actividades de la “U”, que tanto los procesos académicos como administrativos seguirán de manera normal y no habrá motivo para interrupción de alguna clase.    Germán Rojas, consejero del CES, explicó que por ahora los decanos, rector, vicerrectores y quienes integran el Consejo Universitario seguirán en funciones hasta que la comisión interventora lo disponga. 

Gabriel Galarza, otro integrante del CES, antes de la rueda de prensa, reveló que la intervención también se registró por denuncias hechas de dirigentes estudiantiles sobre la universidad. 

Además mencionó que la designación del rector y vicerrectores encargados se hizo sin quórum por parte del Consejo Universitario, y que por eso el proceso no es válido.La comisión interventora está conformada por Stalín Santacruz  Terán como presidente; Xavier Cobeña se encargará del área administrativa y financiera, y Antonio Cárdenas como jurídico. 

Medardo Mora, exrector y fundador de la universidad, manifestó que es un momento “muy triste” pues se siguió todo un proceso para evitar esto. “Creo que la campaña electoral premeditada es la causante de  todo, existieron acusaciones entre candidatos que desprestigiaron a la universidad”, expresó. 

Mora indicó que la Uleam es una institución con mucho prestigio y un gran avance y tal vez eso “desbordó la ambición de ciertos grupos”, agregó.