Las grandes competiciones del Viejo Continente atan con antelación los retos de enjundia. Dejan asuntos menores para las últimas jornada. Como la definición de los puestos europeos o las cuestiones de descenso y permanencia. Únicamente el torneo español, el francés, con el mano a mano entre el Paris Saint Germain y el Lyon y el luso, con la lucha entre el Benfica y el Oporto, siguen en el aire.

Este fin de semana contempló la coronación de tres nuevos campeones.

El Chelsea ganó al Crystal Palace en Stamford Bridge (1-0) y cerró la conquista del título de la Premier League, el quinto en toda su historia y el tercero con el portugués Jose Mourinho como entrenador.

El conjunto londinense amarró el campeonato con tres jornadas de antelación al cierre del curso. Con una ventaja notable, insalvable ya, para el Arsenal, que el lunes juega en el campo del Hull City, para el Manchester United y el Manchester City, que se situó segundo gracias a su triunfo en Londres ante el Tottenham con un gol del argentino Sergio Kun Agüero.

El gol del belga Eden Hazard, en el minuto 45, selló el vigésimo quinto triunfo del Chelsea en la Liga inglesa tras 35 jornadas jugadas. El magnate ruso Roman Abramovich decidió volver a apostar por Moruinho. Dos años después ha sacado rendimiento a su plantel. En su primera época en el Chelsea ganó el título en las temporadas 2004-05 y 2005-2006. En esta segunda ya añade la del presente ejercicio. Es el octavo trofeo que el preparador luso consigue en el fútbol inglés. A los éxitos en la Premier añade tres Copas de la Liga (2005, 2007 y 2015), una Copa de Inglaterra (2007) y una Supercopa inglesa (2005).

Así, el Chelsea recuperó su corona en la Premier League después de cinco años y acabó con la hegemonía de los clubes de Manchester, que entre City y United se habían repartido las cuatro últimas Ligas.

Veinticuatro horas antes el Juventus cerró un éxito anunciado. Un gol del chileno Arturo Vidal dio el triunfo en Génova al equipo turinés (0-1), que selló la consecución del cuarto título consecutivo de la Liga de Italia, que acumula 31 a lo largo de su historia.

Un solo punto necesitaba la "Vecchia Signora" para amarrar matemáticamente el campeonato con cuatro jornadas de antelación y tres días antes de recibir al Real Madrid en la ida de semifinales de la Liga de Campeones.

El Roma se impuso este domingo en casa a un aletargado Génova y arrebató, así, la segunda posición al Lazio, que no fue capaz de imponerse al Atalanta, ante el que acabó empatando a uno.

Por eso, Roma y Lazio encararon esta trigésimo cuarta jornada del 'calcio' con la intención de acaparar la segunda plaza, que además proporciona billete directo a la próxima Liga de Campeones.

También se cerró la lucha por el título en Escocia. El Celtic conquistó su cuarto trofeo consecutivo, la número 46 en toda su historia, tras la derrota del Aberdeen ante el Dundee United después de que el campeón ganara el viernes por 5-0 y con tres jornadas de antelación.

Francia prolongó el pulso entre el Paris Saint Germain y el Lyon. Ninguno cede a tres jornadas para el final, con una renta de tres puntos para el vigente campeón, que no acusó la presión a la que le sometió su perseguidor y ganó en Nantes (0-2).

El uruguayo Edinson Cavani y Blaise Matuidi devolvieron al equipo de Laurent Blanc a la cima de la competición gala, provisionalmente arrebatada por el Lyon el sábado tras ganar al Evian (2-0).

El Olympique de Lyon no falló en su compromiso ante Evian Thonon Gaillard y ganó 2-0 para colocarse en la primera posición de la Liga de Francia a la espera del encuentro que disputará el domingo el París Saint Germain contra el Nantes.

El conjunto de Hubert Fournier no se rinde y quiere seguir luchando hasta el final por volver a ganar un título que no levanta desde la temporada 2007/08. Han pasado ya ocho años desde el último de los siete trofeos seguidos que logró y, de momento, se mantiene con opciones de reeditar aquellos años felices.

En esta ocasión, su rival, el Evian, no pudo evitar una derrota con la que seguirá sufriendo por no descender para alegría de los hombres de Fournier, que con un golazo de falta obra de Clément Grenier en la primera parte y otro de penalti de Alexandre Lacazzete en la segunda, finiquitaron un duelo con pocos sobresaltos para los locales.

En Alemania, con el título amarrado por el Bayern, que encajó en Leverkusen su tercera derrota en la Bundesliga, la lucha por los puestos europeos acapara ahora la intención de los equipos.

El Wolfsburgo ha bajado de ritmo. Sumó ante el Hannover su tercer encuentro sin ganar y ha puesto en riesgo la segunda plaza que parecía tener asegurada. Al acecho está el Borussia Monchengladbach, a dos puntos, tras ganar en Berlín al Hertha (1-2). A continuación está el Bayer Leverkusen, que ganó al Bayern y tiene entre ceja y ceja su presencia en la próxima 'Champions'.

En Portugal, el Oporto logró con más apuros de lo esperado la victoria a domicilio frente al penúltimo clasificado, el Vitória de Setúbal (0-2), un triunfo imprescindible para mantener la presión sobre el Benfica y poder seguir soñando.

A falta de tres jornadas para acabar el campeonato, el conjunto blanquiazul se mantiene a tres puntos de distancia del líder. El Benfica no tuvo piedad y vapuleó al Gil Vicente a domicilio por 0-5, con goles del uruguayo Maxi Pereira (2) y de los brasileños Luisao, Jonas y Lima.

En Holanda, con la Liga en manos del PSV semanas atrás, fue el Groningen el que logró el primer título de su historia y se proclamó campeón de Copa tras imponerse al Zwolle (2-0) en la final disputada en el estadio De Kuip de Rotterdam. EFE