Tiene la apariencia de una isla caribeña, pero incrustado en medio de los Andes. El Quilotoa sorprende a más de uno.
Su formación, según la leyenda, se dio cuando un hombre llevó el ganado de su patrón a un hueco que se formó después de una explosión. Aquí enterró panela, vainilla y un quintal de sal y partió de viaje. Cuando retornó se llevó una gran sorpresa, porque el pozo se encontraba lleno de agua. Y es que para los antepasados solo la magia podía explicar las bondades de este paisaje.
Los nativos, las artesanías, la flora, la fauna, las construcciones, el clima, la gastronomía y la geografía hacen de este atractivo andino uno de los más apetecidos por el turismo nacional e internacional. El trayecto hacia el Quilotoa también forma parte del atractivo turístico, pues zigzaguea por los Andes y se adentra en el páramo andino.
DATOS. Se pueden realizar varios deportes como el senderismo alrededor del volcán, paseo en bote o kayak, además observar animales como venados, lobos de páramo, conejos, zorros, entre otros. Hay impresionantes paisajes para los amantes de la fotografía.
DESTINO. Desde Quito se toma la vía Panamericana hasta la entrada a Pujilí, desde esta localidad se toma el camino asfaltado en dirección a Zumbahua. Antes de esta población se va al norte hasta llegar al cráter (se pregunta localmente la ubicación). Hay unos 63 Km desde Pujilí.