Ayer, la Comisión de los Derechos de los Trabajadores de la Asamblea continuó recibiendo observaciones y propuestas en torno a este proyecto de ley, con la presencia de los directivos del IESS y un grupo de jubilados.

La presidenta de la comisión, Betty Carrillo, aseguró que el organismo legislativo tiene los informes de los estudios realizados y del análisis técnico por parte del IESS, en los que se evidencia que no hay  posibilidad de que se suspenda el pago de las pensiones jubilares.

Asimismo, Antonio Tipán, funcionario del IESS, afirmó que existen los recursos en la institución para solventar estas obligaciones. Precisó que el estudio actuarial recoge las condiciones de aportación, las condiciones de jubilación, el tipo de pensiones con sus máximos y mínimos.

Respalda. Fausto Cayambe, asambleísta de Alianza PAIS, defendió la propuesta del Gobierno de eliminar la contribución del Estado al IESS y cambiarla por un texto que indique que se le entregará “lo que necesite”. 

De acuerdo con Cayambe, la idea sería que para que el déficit demore en presentarse hasta el 2037 se cambie la tabla de incremento de pensiones actual, por una que se base en el alza de la inflación. 

Este índice anual del 2014 fue de 3,67 % y en el 2015 se espera una inflación de 3 %. La tabla que está en vigencia, en cambio, prevé aumento de entre 4,36 % y 16 % a las pensiones, dependiendo del monto. Mientras más bajas, tienen mayor subida y mientras más altas, el alza anual es menor.

Cayambe explicó también que se podría hacer un ajuste en la distribución de los rubros del aporte, para bajar lo que va a riesgos del trabajo y cesantía y subir a pensiones y salud.

Temor. Entre los jubilados hay preocupación. Manuel Briones, jubilado, lamentó la propuesta oficialista de eliminar el aporte. “El quitar el aporte es echar un caos sobre la clase jubilada. Nosotros aún no entendemos por qué suprimir un aporte que se ha pagado siempre”, dijo. 

Opinión similar tiene Manuel Mendieta, quien asegura no creer el ofrecimiento del gobierno de restaurar el aporte cuando el IESS lo necesite. “Esa es una oferta de este presidente, pero qué va a pasar cuando él no esté y el aporte no sea una obligación”, se preguntó. 

Garantía. El presidente de la Confederación Nacional de Jubilados, Marcelo Jijón, considera que “el Estado debe mantener su aporte fijo del 40 % a las pensiones jubilares”, para garantizar los fondos de los demás afiliados del IESS. “Dicen que hay una cierta cantidad inmensa de dinero que el Seguro Social recibe cada mes, les quiero recordar que también hay los fondos de ahorro de los jubilados activos, eso no se puede tocar, solamente cuando la persona se jubila ese fondo de ahorro pasa a ser parte del dinero que se paga en las pensiones jubilares”, indicó. 

Jijón también rechazó la postura gubernamental de retomar el aporte. “Este es un ofrecimiento totalmente incierto, nosotros queremos que sea el 40 % porque consta en la Ley de Seguridad Social, lo otro es variable ”, dijo. 

El presidente de la Federación Nacional de Afiliados al Seguro Social Campesino, César Vuelva, también se muestra preocupado. “La eliminación del 40 % del Estado ecuatoriano, en otras palabras, robarle derechos a los afiliados, significa una pérdida de 360 millones de dólares. Los jubilados de todo el país cobrarán 25 dólares menos”, denunció.