La Policía de Yakarta, Indonesia, quemó 3,3 toneladas de marihuana en un descampado de la ciudad, provocando que los habitantes de un barrio cercano tuvieran síntomas de dopaje.
Según informó el Daily Mail, el humo de la fogata fue arrastrado por el viento, y provocó que los vecinos de la localidad sintieran mareos y dolor de cabeza.