Actualizado hace: 935 días 2 horas 15 minutos
Enrique Delgado Coppiano
Espejo: vendimia pedagógica

El 20 de marzo del 2015 la educación chonense y manabita vivía una ceremonia tensa en afectos y sentimientos.

Sábado 28 Marzo 2015 | 04:00

 Fue cuando se cumplía la última graduación de profesores de Educ. Básica y Educ. Inicial en el “Instituto Normal Superior Eugenio Espejo”. 

Ciento cuarenta y ocho jóvenes educadores, con lo que se cerraban 79 años de historia educativa de una entidad que durante estos se convirtió en un referente pedagógico y cultural.
Del mismo egresaron miles de profesionales de la enseñanza que fueron baluartes de la implantación del laicismo y la universalización de la educación que desterrará el analfabetismo de la población ecuatoriana, como lo propuso e impulsó la Revolución Liberal Radical propugnada por el Cóndor Ecuatoriano Gral. Eloy Alfaro Delgado. 
Que la tarea fuera dura, aceptada mayoritariamente y cuestionada por algunos, nada le quita de grande y luminoso al normalismo ecuatoriano, en un ciclo destacado del quehacer educativo.
Basado en los principios Herbatianos y difundidos universalmente por Pestalozzi, basado en la transmisión de los valores. 
La visión educativa del normalismo tiene que ser valorada en la dimensión total de los logros obtenidos. 
El Instituto Normal Superior Eugenio Espejo será añorado por el fulgor intelectual de sus creadores, profesores y alumnos que ennoblecieron la simiente de saber y enseñar.
Hoy existen otras ideas y avances en el plano educacional respaldadas por inversiones en Escuelas del Milenio y las tecnologías de las invenciones digitales.
Bienvenidas sean estas innovaciones,  que por buenas que sean siempre deberán ir acompañadas de la capacitación docente guiada en la excelencia del proceso enseñanza – aprendizaje, 
Pues así lo reclama una creciente población educativa en todos los niveles hoy establecidos, reconociendo además que, junto con los funcionamientos de nuevos estamentos como las Escuelas del Milenio, persisten en las zonas campesinas cientos de escuelas rurales unidocentes.
Y es que a las que se debe dar un trato preferente para evitar que se agranden las diferencias entre la docencia urbana y la ruralidad, esta última persiste y debe ser privilegiada. 
Es imprescindible que el sector educativo reciba del Estado el mayor apoyo para su real vigencia por ser el factor preponderante de una colectividad mejor y ejemplar, que día a día mejoren la formación de niños, jóvenes y adultos en la búsqueda de un Ecuador integralmente superior en todos los aspectos del avance social. 
Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
  • ¿Qué te pareció la noticia?
  • Buena
  • Regular
  • Mala

Más noticias