La imagen personal es muy importante para el futbolista Cristiano Ronaldo, quien no está dispuesto a permitir que su figura de cera del Museo de Madrid, España, luzca desaliñada.
Para ello, el astro portugués envía a su propio peluquero hasta el museo, para que peine a su "doble" una vez al mes, según informó Gonzalo Presa, director de comunicación del museo.