Según reportan medios internacionales, el artista se encontró con "una atractiva mujer rubia" en un bar de Moscú, donde disfrutaron de una copa y se metieron juntos en una sauna, momento en el que el hombre se desmayó.
Al día siguiente, Nikolaev despertó con un dolor muy agudo en la zona genital y cubierto de sangre.
Ya en un hospital cercano, los médicos les indicaron que había sido castrado por un experto, según información publicada en el portal Daily Mirror.
Por la forma en que le fueron extirpados sus testículos, las autoridades rusas han determinado que Nikolaev fue víctima de una banda que se dedica al tráfico de órganos.
Tras el escándalo, el hombre, que es casado y trabaja como animador infantil, se sintió muy avergonzado al hablar de su historia a varios medios de comunicación.