Actualmente se busca el financiamiento, que ha sido la causa principal del atraso del proyecto, reconoció Andrade. 

Sin embargo, aseguró que las gestiones no  están paralizadas sino que siguen en pie y dijo desconocer la declaración que hizo semanas atrás el ministro de la Producción, Empleo y Competitividad,  Richard Espinosa, sobre que este año no estaba contemplado conseguir recursos en China para el proyecto debido a la caída del precio del petróleo.

“Tenemos que financiar es el 70 % de un proyecto de 11 mil millones de dólares, la tarea es bastante complicada, no es muy fácil, pero ya estamos en la parte final para conseguir ese financiamiento”, dijo Andrade.

ACLARACIÓN.El Diario publicó por error, el sábado anterior, en su página 6A, que la construcción del proyecto iba a iniciar en el 2018, cuando en realidad se quiso informar que la refinería  estará lista en esa fecha, según informó el gerente.

ACUEDUCTO. El funcionario dijo que ya han culminado la mayoría de obras que se han propuesto y que actualmente se está construyendo el acueducto desde la presa La Esperanza hasta la Refinería, que tiene un 57 % de avance, señaló.

AGUA PARA RIEGO. Sobre si se podría utilizar la tubería en otras labores, Bismarck Andrade explicó que los 93 kilómetros de tuberías instaladas son única y exclusivamente para trasladar agua; sin embargo, dijo “alguna gestión se podría hacer, nada es definitivo, para permitir que cierta cantidad de agua se libere para otras actividades, pero ahora no lo puedo garantizar”, indicó.

Al consultarle si estos trabajos no se deterioran hasta el 2018 que entre a funcionar la Refinería, Andrade indicó que no, ya que el contrato con Odebrecht contempla el mantenimiento. “Ya se entregó la obra provisionalmente pero tiene seis meses para mantenerla, de allí en adelante ese mantenimiento correrá por la Refinería del Pacífico”, manifestó.

PUERTO. Andrade  reconoció que inicialmente el proyecto contemplaba un puerto pero dijo que en estos momentos la Refinería no utilizará ningún puerto ni para recibir crudo ni para exportar productos, indicó.

“Nosotros construiríamos  un acueducto desde Quinindé en Esmeraldas hasta la refinería”, mencionó.

Dijo además que construirían un “poliducto desde la Refinería hasta Monteverde para evacuar los productos que sean necesario exportarlos o llevarlos hasta La Libertad, donde haríamos un almacenamiento para distribuirlos en el mercado nacional.”