Mero dijo que hasta las 11h00 de ese día, cuando sus dos hijos salieron de la finca ubicada en el sitio Corina del Parral, de la zona La Manga del Cura, para ir al colegio en Santa María de esa misma jurisdicción, tanto su hermana como su tío quedaron con vida y trabajando en un tendal (secadero) de cacao, en el patio de la casa.

El hombre narró que cerca de las 17h30 llegó al lugar para llamar a su tío, pero le extrañó que no le contestara y al asomarse por una ventana hacia el interior de la planta baja de la vivienda,  observó que caía sangre desde la parte alta.

Aseguró que armándose de valor y con un machete en la mano, para defenderse ante cualquier peligro, subió las escaleras y ya arriba encontró el cadáver de su tío tirado sobre el piso.

Contó que este desgarrador cuadro hizo que saliera corriendo  a pedir ayuda a sus vecinos y familiares; al rato, cuando retornó acompañado e ingresó a la planta baja de la casa, se llevó una segunda desagradable sorpresa, pues su hermana Ramona Elena también había sido asesinada con arma blanca. Ambos cuerpos presentaban huellas de degollamiento, dijo la Policía.

A la morgue. Entre la tristeza que les embargaba por el doble asesinato descubierto, las personas que se encontraban en el lugar llamaron a la Policía acantonada en Santa María y ésta a los agentes de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorciones y Secuestros (Dinased) de El Carmen, quienes con dificultad por las malas condiciones del camino de ingreso a la finca, trasladaron los cuerpos al centro forense de Santo Domingo de los Tsáchilas, para que se les practicara la autopsia.

Hipótesis. En declaraciones a El Diario, el coronel Edison Valencia, jefe policial de El Carmen, dijo que según arrojan las primeras indagaciones, el doble crimen podría tener origen en una venganza.

Ayer al sector donde fueron encontrados los cadáveres, ingresó un segundo  equipo de investigadores  de la Policía para seguir recabando informaciones e indicios que los ayuden a dar con el paradero de los asesinos de Benito Solís y Elena Mero.

Velorio. Benito Solís Gómez está siendo velado en la población Santa María, mientras que su sobrina Ramona Elena Mero es velada a pocos kilómetros de distancia, en el sitio El Retén, lugares en donde hoy serán sepultados, por separado.