Williams Mendoza, psicólogo, dice que en esta época, que se celebra el cumpleaños de Jesús, encontrarse con la familia, fortalecer la relación y perdonarse cualquier error que como ser humano se tiene, es ideal para vivir estas festividades en tranquilidad y con la “conciencia limpia”. 

 

HISTORIA. Antonio V. comenta que hace dos años, justo un 24 de diciembre, mientras todos compraban regalos y preparaban la cena, él y su esposa estaban en el hospital porque sufrieron un accidente (el vehículo en el que se movilizaban se salió de la calzada y se volcó); sus familiares a pesar de todo, pues él se describe como una persona que no es muy afectiva y que siempre vivía en conflicto con sus padres, estuvieron ahí apoyándolos en un momento doloroso.  “Mis padres fueron los primeros en enterarse de la noticia, enseguida nos alcanzaron en el hospital y confieso que me dio un poco de pena y las lágrimas se me salieron cuando mi madre me abrazó, y me dijo que sólo eran unos cuantos golpes y que en unos minutos nos iríamos a casa”. 

Antonio indica que esa noche como es tradición familiar, todos le cantaron al “Niño Dios” y le pidieron que derrame bendiciones sobre ellos; él cuenta que después de eso, pidió la palabra para disculparse por su comportamiento, ellos le respondieron que todas las familias tienen problemas, pero que siempre se los supera. 

 

MÁS. Laura Mera, psicóloga, considera que en estas fechas las personas deberían no sólo pensar en ellas sino  en sus familias y amigos, “deberían realizar un análisis de sus comportamientos con los demás, si han lastimado a alguien o le han fallado, lo ideal sería reconocer los errores y tratar de corregirlos”. 

Mera, señala que cada ser humano debe apreciar la vida y sobre todo quererse más, porque eso es clave para saber amar a los demás, y amarse a uno mismo. 

Paola Vásquez concuerda con que se debe reconocer en lo que se ha fallado.  “Somos humanos y erramos, pero  también es de humanos reconocer en qué hemos fallado y quitarnos esa molestia de encima, ya que sin rencor es mucho más rápido olvidar”, agrega. 

Vásquez añade que todo esto se logra con la comunicación. 

La especialista indica que no es necesario que la persona que ha lastimado pida disculpas.