Ayer un grupo de vendedores decidió realizar una huelga de brazos caídos en demanda que cambien las carpas y algunas reglas de la Dirección de Comisarías del municipio.

La jornada causó el cierre parcial de la calle Chile, desde la 9 de Octubre hasta la Franciso de P. Moreira, en el horario de 09h00 a 12h00.

Eduardo Martínez, presidente de la Asociación 12 de Octubre, dijo que en los comerciantes hay malestar debido al uso obligado de carpas, las cuales, mencionó, son de lona y se ponen en tres de los cuatro costados de los locales; aseguró que aquello en una zona como Portoviejo genera mucho calor y oscuridad, que aleja a los clientes y afecta la salud de los comerciantes. 

También señaló que las nuevas reglas dispuestas por la Dirección de Comisarías son muy drásticas al punto de que un comerciante puede perder su puesto si no llega a laborar dos días. Dijo que aquello ya sucedió con Willians Banchón. El tercer requerimiento es que regulen a los fabricantes de ropa que llegan de Pelileo.

Adriana Navia, otra vendedora, insiste en que los puestos tengan salida a la calle Chile y que se permita sacar la lona de ese lado.

Willians Salazar, director de Policía municipal, señaló que los comerciantes quieren seguir laborando como antes, en medio del caos y lo que busca la municipalidad es ordenar la ciudad.

José Flores director de Comisarías, indicó que el uso de las carpas fue aprobado por los propios informales. 

Martínez dijo que ayer lograron contactar con el alcalde Casanova, quien garantizó que se analizará el tema para luego tomar una resolución.