El hombre era oriundo de la parroquia San Placido, de Portoviejo.
Los familiares se enteraron de su muerte el pasado lunes 17 de noviembre, aproximadamente a las 05h30.
Patricia Intriago, hermana del occiso, manifestó que la autopsia reveló que su pariente murió por asfixia.
La mujer indicó que su hermano vivía en Barcelona con otra ecuatoriana, quien presuntamente lo habría matado.
Patricia indicó que uno de sus familiares que vive en España le dijo que la mujer que vivía con su hermano se entregó a la Policía y se declaró culpable señalando que le había dado una dosis de un presunto medicamento que servía para dormir, pero que se le pasó la mano.
La Policía española realizó el levantamiento del cadáver y lo trasladó a un anfiteatro, donde debe ser retirado por sus familiares.
Se están realizando los trámites para repatriar el cadáver y llevarlo a su tierra natal San Plácido, donde será sepultado en el cementerio general.