Fue así como empezó a convertir en el precioso metal lo que al paso encontraba… hasta que murió de hambre cuando la comida y el agua, al tocarla, se convertían en oro.

Yo no sé si lo mismo le podría suceder al hombre más rico del mundo: Carlos Slim, conocido como “Rey Midas” en México, cuya fortuna llega hoy a 79.600 millones de dólares, según la revista Forbes.

He tocado este tema luego de ver en GamaTV a la asambleísta Paola Pavón (Alianza País), explicando en qué consiste el proyecto destinado a “limitar las utilidades de las operadoras telefónicas móviles” (celulares), mediante una fórmula que en la legislación ecuatoriana se denomina “regalías”, similar a la que se aplica a las petroleras por la extracción de los “recursos naturales no renovables” (art. 317 de la Constitución).

Estoy totalmente de acuerdo en que el Estado debe participar de un trozo más grande del gran pastel que vienen engullendo las operadoras privadas de la telefonía móvil, tal como lo dije en esta columna a raíz de que nuestro gobierno (2008) autorizó la explotación de este servicio durante 15 años por $ 700 millones de “regalías” a Claro de propiedad de la empresa América Móvil, una de las fachadas del Rey Midas mexicano.

Pero (el infaltable), no creo conveniente la tabla propuesta para el cobro de “regalías”. 

¿Por qué? Ah, porque podría prestarse a confusiones por la forma cabalística de calcular las utilidades en base a parámetros difíciles de controlar con exactitud.

¿Para qué complicarnos con fórmulas complicadas, si bien podemos aplicar metodologías más sencillas? Ejemplo: Si conocemos que en Ecuador, hasta septiembre del 2014, registra SUPERTEL: 17’929.000 celulares operados por Claro 68,31%, Movi 27,86% y CNT 3,83%, y calculamos un consumo conservador promedio de un dólar diario por cada celular, el resultado matemático sería que el total que ingresa a las cajas registradoras de las susodichas operadoras sería: $ 17’929.000 cada 24 horas, multiplicados por 360 días, estamos hablando de $ 6.454 millones anuales.

Supongamos que los costos de operación del servicio de la telefonía móvil consumen un 50%, debería quedar una utilidad líquida de $ 3.227 millones repartidos entre Claro, Movi y CNT. O sea, que a los bolsillos del Midas mexicano, le deben llegar (de su 68,31%) $ 2.194 millones al año… sólo de Ecuador.(Continuará)