Esto en razón a que las ciudades son escenarios de las oportunidades y por eso son atractivas y nos impone en definitiva un reto de administración. 

Al gobierno local hay que verlo ahora desde varias perspectivas: no sólo la dotación de infraestructura sino desde el punto de vista de mejoramiento de la calidad de vida de sus conciudadanos, que implica darle la debida importancia y priorización a los departamentos de desarrollo comunitario y social. 

A las ciudades hay que hacerlas también más competitivas y más humanas. 

La cualidad mayor del gobierno local, como administración pública, es su cercanía a la base social. 

En este sentido debe mantener como objetivo central de su accionar la promoción de la participación ciudadana, particularmente de los grupos locales excluidos de los beneficios del desarrollo; es decir, dinamizar el desarrollo social.  Significa dotar de infraestructura básica a los grupos más pobres. 

Generar fuentes de empleo, utilizar los recursos del sector privado local y analizar la participación popular de manera productiva.

Manejar al municipio con criterio de calidad empresarial significa optimizar el uso de los recursos, de tal manera que se obtenga el máximo beneficio para sus asociados con los mínimos costos; esto implica trabajar con criterios de máxima productividad, eficiencia y efectividad, mejoramiento continuo y alta capacidad gerencial. 

Es por esto que el administrador (alcalde) debe ser un funcionario eficiente, porque el problema urgente es atacar la pobreza y mejorar la calidad de vida de la gente, ya que el municipio tiene que ver con servicios de transportes, seguridad, residuos sólidos, donde el ejercicio de la alcaldía es un fin en sí mismo, ya que si se utiliza como un peldaño podría dejar de atender las necesidades de la gente, donde en lo posible debe tender a redistribuir  el ingreso, pero a la vez generar recursos propios. 

Actualmente uno de los pocos municipios manabitas con un proceso de revisión histórica, planificación socioeconómica y ejecución de obra pública en relación a la competitividad, producción y medio ambiente, es el Gobierno Autónomo Descentralizado  de Portoviejo, a partir de su nueva administración.  479 años debe ser la campanada histórica municipal dentro del ranking nacional para llegar a ser uno de los primeros por decisión, eficiencia y probidad. Con un punto de inflexión para proyectarse al nuevo milenio y con una revolución cognitiva que prioriza la planificación con la matriz productiva  y consolide el futuro de la ciudad.