Cuenta que el secreto para controlar esta enfermedad es el cuidado en las comidas. “Desde hace diez años tengo alguien que me prepara exclusivamente los almuerzos y meriendas. Además mi hijo me hace la prueba de azúcar cada día”, cuenta.
Sin embargo, esta enfermedad es impredecible. “Me cuido y aún así he ido a la clínica en dos ocasiones, una vez se me bajó el azúcar y otra ocasión se subió”, indica.
RIESGO. Álvaro Ponce, diabetólogo del hospital Verdi Cevallos, explica que esta enfermedad afecta al 10% de la población manabita y muchas veces viene acompañado de otro mal, la hipertensión. “Todo diabético es hipertenso y cuando se unen es mayor el riesgo”.
El principal factor para que se produzca esta enfermedad, según Ponce, es una incorrecta alimentación, o por factores hereditarios y hasta por el nivel étnico.
El Ministro Coordinador de la Política Económica, Patricio Rivera, se pronunció sobre el posible impuesto a la comida chatarra, y señaló
que no tiene la intención de generar presión tributaria sino promover una buena alimentación en la población.