Actualizado hace: 931 días 20 horas 54 minutos
Costumbre
El horno de leña asegura tradición de sabor

Dicen que los alimentos saben mejor si se cocinan en hornos de leña, y Blanca Zambrano lo confirma. A pesar de la revolución tecnológica y la oferta de aparatos eléctricos, ella sigue utilizando este horno para prepararlos.

Lunes 01 Septiembre 2014 | 04:00

Madera, olla de barrio y caña guadúa se usa para elaborarlos. De acuerdo a investigaciones arqueológicas, el uso del horno viene desde las culturas antiguas como Valdivia (4000-1450 A.C.). Cuando llegaron los españoles lo usaban las culturas Jama-Coaque (500 A.C.-1650 D.C.) y Manteña (800-1532 D.C.), si se habla estrictamente a Manabí. 
Por esos días los hornos estaban a nivel del suelo de las viviendas.
Posteriormente se construyeron estructuras de madera en forma de cubos, en donde se empotraban las ollas de barro que sirven como hornos; y para colocar las ollas se utilizan hierros de distintos diámetros, aunque los preferidos son las láminas de hojas de resorte de vehículos.
ELABORACIÓN. Los hornos de leña son elaborados por los padres de familia o por un carpintero. Son construidos sobre una estructura de madera con patas y paredes del mismo material.
Se trata de una caja elevada que funciona a manera de estufa. En medio de la caja se ubica una vasija conocida como olla de barro. En la parte baja y en los alrededores de la olla se coloca tierra, ceniza y restos de barro. De esa forma, el horno queda listo para su uso. Madera de desecho y cortezas de árboles muertos son el combustible que se usa para avivar el fuego. 
En los filos del horno y sobre el fuego se colocan platinas de hierro. Allí descansan las ollas de aluminio y también de barro, mientras se cocinan los alimentos. El horno puede ser de dos metros de largo, 1,50 de ancho y uno de alto, según el cocinero Juan Pablo Cedeño. 
“Vivo en Rocafuerte, trabajo hace cinco años en la preparación de comida criolla para entregar a domicilio. La gallina, el cerdo, el seco de chivo y las sopas de legumbres matizadas con maní se cocinan mejor en este horno, porque el sabor es diferente. Los clientes lo saben y por eso es que en el área de cocina el horno manabita no puede faltar”, explica Juan Pablo Cedeño.

 

Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
  • ¿Qué te pareció la noticia?
  • Buena
  • Regular
  • Mala

Más noticias