La oportunidad al trabajo es un innegable derecho universal, por lo que debe alentarse a que quienes estiman poseer las condiciones requeridas para tal actividad la lleven a cabo, considerando que no solamente apoyan su economía sino que también dinamizan la de la colectividad.

Sin embargo, así como debe observarse derechos tiene que cumplirse con obligaciones, por lo que para ejercer el negocio debería cumplirse con los requisitos exigidos. Y en lo referente a la alimentación tienen que regirse principalmente por las normas de salud. Y es en aquello que debemos hacer énfasis, porque ante la proliferación de los comedores populares, sembrados en calles, veredas y plazas, puede imperar el desorden que impida el control y genere la insalubridad.

Es de esperar que las autoridades correspondientes estén alertas a las condiciones en que se desarrollan estas ventas, especialmente en los negocios improvisados que realizan su trabajo al aire libre.