Al contrario, si S.M. Rafico I no le ha respondido ni una de las tres primeras cartas con el membrete de la Cámara de Comercio de Manta (cuyo condumio lo hemos reproducido en los capítulos anteriores), ella sigue insistiendo con nuevos argumentos:

Of. S/N. 3 de abril del 2012: Al Excelentísimo Señor Presidente: “…Es preciso que usted consolide el anhelo de los manabitas, de tener un puerto funcional, eficiente y efectivo que desarrolle a toda la región a partir de la generación de una Zona Especial de Desarrollo Económico, consolidando carga, haciendo de Manta una ciudad de servicios integrales y complementarios, lo que redundará en la generación de empleo y riqueza. Para ello se debe tomar correctivos inmediatos, de tal suerte que no se siga manteniendo un modelo de gestión ineficiente, sin visión de futuro y con poca conciencia cívica…” Respuesta: ¡Ninguna! Y van: ¡Cuatro al tacho!

Pero (el infaltable), veamos ahora el quinto oficio. ¿Será cierto que no hay quinto malo, ah?

Of. 181-09 abril del 2013: Al mismo Supremo Destinatario: “… Por varias ocasiones he remitido a usted y varios ministros, información técnica sustentada y oportuna del manejo inadecuado del Puerto de Manta. He insistido por intermedio de varios interlocutores del Gobierno, pero hasta la fecha se sigue inhibiendo mis denuncias. Estoy segura, señor Presidente, que a sus manos no debe haber llegado ninguna de ellas. Es por esta razón que insistiendo en ellas le expongo un resumen que tiene que ver directamente con el manejo de Autoridad Portuaria de Manta.

“… En el mes de septiembre del año 2009, existían los estudios técnicos tanto del dragado como el reforzamiento del muelle, mismos que fueron realizados por TIDE y el Ing. Kléber Erazo, respectivamente. Inclusive existían los términos de referencia para la contratación de los estudios complementarios para dichas obras: Es decir, existían recursos disponibles y una verdadera hoja de ruta con cronogramas valorados. Si los administradores actuales hubiesen realizado estas obras hasta finales del segundo semestre del año 2010, hoy no tuviésemos la penosa realidad de contar con un Puerto azolvado por el sedimento, es decir, sin su ventaja comparativa…”

Sigue la carta de Lucía I con muy serias revelaciones y advertencias a Rafico I, que conoceremos en el próximo capítulo si el Gran Arquitecto del Universo lo permite.