Esta idea no debe prosperar porque se trata de una virtual incautación de fondos que pertenecen a miles de personas, lo que está en contra de la libertad y el derecho de las personas a tener un patrimonio 

¿Cuál sería el siguiente paso o el siguiente fondo al que se echaría mano?

Aparentemente detrás de esta idea está la necesidad de dinero del fisco para cubrir las cada vez crecientes necesidades de un Estado que crece y crece en detrimento de sus ciudadanos. 

Los fondos de las 63 agrupaciones que serían afectadas suman alrededor de mil millones de dólares, que seguramente luego servirán para que el BIESS compre papeles financieros al gobierno, ayudando así a cubrir el déficit fiscal.

En Ecuador el Estado es cada vez más grande e invasivo en áreas que no le competen; mientras que la gente común tiene cada vez menos participación política; aunque seguramente la propaganda diga lo contrario. 

Ese hiper estatismo no es conveniente.