En parte de la población, los anuncios han sido tomados con cierto escepticismo debido a los evidentes problemas por los que aún atraviesa el suministro de energía eléctrica en el país.

Todavía es visto como “normal” que el servicio se interrumpa sin ningún tipo de anuncio y, mucho menos, explicación de la empresa proveedora. En muchos casos, esas suspensiones tardan horas.

Fallas en el sistema, daños en transformadores, sobrecarga en las redes y hasta caída de ramas de árboles pueden estar entre las causas de este problema que causa molestias y, con frecuencia, pérdidas económicas a los usuarios.

Si existe la intención de aumentar la oferta de electricidad, en buena hora. Y mucho mejor si con esto bajan los costos. Pero también es necesario que se ponga énfasis en mejorar la infraestructura de distribución. Ahí podría estar la falla, si no se toma en cuenta que todavía hay lugares servidos por redes obsoletas en los que en cualquier momento ocurre un apagón.